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El Día Mundial de la Alimentación se celebra todos los años el 16 de octubre, aniversario de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) que se fundó en 1945. Este día tiene como objetivo promover la alimentación saludable y garantizar el acceso a alimentos suficientes para mantener la salud, así como erradicar el hambre.

Este año 2022 nos alegramos de ir dejando atrás la pandemia, ya que el tiempo de confinamiento y las medidas adoptadas influyeron en nuestra alimentación. Aumentó notablemente la obesidad por el sedentarismo impuesto y por el consumo de comida poco saludable, con excesos de azúcar refinado y grasas trans. El estado de la seguridad alimentaria se ve afectado ahora por los conflictos internacionales, las sequías por el calentamiento del planeta y por la escalada de precios de los alimentos saludables, que hacen que las desigualdades aumenten y se complique el acceso a una dieta sana.

Necesitamos construir un mundo sostenible donde todos, en todas partes, tengan acceso regular a suficientes alimentos nutritivos. En el mundo se producen alimentos suficientes para todas las personas, sin embargo, tenemos hambre, obesidad y un exceso de desperdicio de alimentos, muestra de un gran desequilibrio en nuestros sistemas alimentarios. Debido a su carga ambiental, reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos es esencial, por lo que debemos de ser conscientes de qué medidas adoptar para evitarlo.

Algunos de estos hábitos son sencillos y podemos llevarlos a cabo en nuestro día a día:

  1. Adopta una dieta saludable y sostenible, prepara platos ricos en nutrientes y sencillos de cocinar, aunque a veces el ritmo acelerado del día a día nos lo ponga difícil.
  2. Compra solo lo que necesites, almacena los alimentos con cuidado para evitar que se estropeen y consume frutas y hortalizas que, aunque puedan tener mal aspecto, conservan su sabor.
  3. Comprende las etiquetas de los alimentos, diferencia entre las fechas de “consumo preferente” y “caducidad”, evita ingredientes no saludables con grasas trans, conservantes y azúcar o sal añadidos.
  4. Haz uso de las sobras, prepara platos combinando los ingredientes de distintas comidas o congélalos para usarlos más adelante.
  5. Apoya a los productores de alimentos locales, consume carne y pescado capturado o criado de forma sostenible, reduce la generación de residuos de plástico optando por productos con un envasado circular, basado en la reducción, la reutilización y el reciclaje.

El Día Mundial de la Alimentación hace un llamamiento a la solidaridad mundial para ayudar a las personas más vulnerables y hacer que los sistemas alimentarios sean más resilientes y puedan proporcionar dietas saludables, sostenibles y asequibles a todos los pueblos del planeta, tratando de garantizar que puedan cultivarse variedad de alimentos para nutrir a una población que crece, protegiendo además nuestro planeta.

La alimentación es uno de los elementos fundamentales en la prevención de enfermedades por lo que es momento de detenernos a pensar en cómo nos alimentamos, con el objetivo de hacerlo de una forma saludable y sostenible . Es importante destacar el potencial que las farmacias tienen como parte esencial de las estrategias sanitarias y de prevención, implantando servicios profesionales que aportan eficacia y beneficios en la salud de los pacientes, con una ineludible labor en la mejora de la alimentación y nutrición de la población.

El valor del conocimiento y del asesoramiento farmacéutico en el ámbito de la alimentación motiva al personal de Sanafarmacia, especializado en Nutrición y Dietética a estar en continua formación para mejorar las recomendaciones a personas con problemas del sistema digestivo o con necesidades de alimentación especiales por alguna patología.


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